En China, una nueva visa de “talento” genera preocupación entre los jóvenes graduados locales

Los primeros titulares de la "visa K" ni siquiera habían pisado suelo chino cuando los internautas ya denunciaban la medida: ¿para qué atraer a extranjeros cuando los jóvenes graduados chinos ya tienen dificultades para acceder al mercado laboral? El miércoles 1 de octubre, fecha de entrada en vigor de la nueva visa, fue el tema más comentado en la plataforma Weibo. La visa multientrada permite a sus titulares permanecer en el país durante más tiempo y evitar el patrocinio de empleadores locales. Esto resulta de interés para los extranjeros que desean permanecer en China después de estudiar allí, o para las startups que puedan tener dificultades para cumplir con los criterios de emisión de visas de trabajo.
Algunos mensajes con tintes nacionalistas se hacen eco de los temas que la propaganda oficial ha machacado, acusando a las autoridades de preferir "fuerzas extranjeras" a las chinas, mientras que otros, francamente xenófobos, expresan preocupación por la afluencia de jóvenes graduados de países en desarrollo, como los indios, cuyo acceso a Estados Unidos se ha visto enormemente dificultado por la administración Trump. Sin embargo, otros señalan el alto nivel de desempleo juvenil, que alcanzó el 18,9% en agosto, su tasa más alta desde un controvertido cambio en el método de cálculo en 2023. Hasta el punto de que los medios estatales tuvieron que proporcionar servicio posventa para el nuevo visado, denunciando la "estrechez de miras" de los comentarios, señala el medio estadounidense CNBC, y recordando que el país aún carece de talento de alto nivel para fortalecer su ventaja tecnológica.
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Le Monde